Oceana es "una organización internacional que trabaja para proteger y recuperar los océanos del mundo." Cuenta con oficina en Madrid y es una de las organizaciones que más activamente denuncia la sobreexplotación a la que está siendo sometida el tiburón y su situación en Europa, donde, paradójicamente, es uno de los lugares del mundo donde este maravilloso animal está más desprotegido por las leyes.
Acaba de publicar un informe titulado "Perseguido por sus aletas", sobre "las poco conocidas pesquerías de tiburones en Europa". Y detalla que "Las flotas europeas capturan especies amenazadas de tiburones en todo el mundo, casi sin ningún tipo de control".
El informe se puede leer haciendo click aquí.
Extraigo el siguiente párrafo, que hace referencia a la flota española:
En 2005, los países de la UE registraron la segunda captura más importante de elasmobranquios (tiburones y rayas) del mundo, con casi 100.000 toneladas métricas. España obtuvo la cuota más elevada con un 39% del total de la UE, seguida por Francia (22%), Portugal (16%) y Reino Unido (11%).Tradicionalmente, los tiburones eran considerados una captura accidental en las pesquerías de especies altamente migratorias como el atún y el pez espada. Ahora, los tiburones son la principal especie objetivo de estas pesquerías formadas por más de 200 palangreros de superficie europeos (en su mayoría españoles y portugueses) que operan en todo el mundo. España posee, con diferencia, la mayor flota palangrera europea. Las capturas de los palangreros españoles en el océano Atlántico están compuestas en más de un 67% por tiburones, mientras que el pez espada y el atún sólo representan una pequeña proporción de la pesca. España también es uno de los mayores responsables en la comercialización internacional de aletas de tiburón.
Sencillamente estremecedor. Desde este blog quiero denunciar, una vez más, la vergonzosa, poco solidaria y poco ética, actuación de los políticos (tengo que hacer un post sobre lo que ocurrió el año pasado en el Parlamento Europeo respecto a estos temas) empresarios y pescadores españoles a los que parece que no les importa en absoluto llevar a la población de tiburón a sus límites. Maldito dinero.
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