viernes, octubre 13, 2006

Pequeño ataque en Daytona Beach, Florida


Un chico de 20 años llamado Kyle Cody, practicante de surf, paseaba al borde del mar en el rompiente de las olas, con el agua apenas a la altura de las rodillas, el pasado 10 de octubre, cuando sintió un intenso mordisco en el tobillo izquierdo. Recibió asistencia médica en la propia playa, cuyos servicios fue a buscar el propio Kyle. Una vez realizada la cura, afortunadamente las heridas fueron leves, salió caminando por su propio pie.
La víctima, Kyle Cody, relató posteriormente que iba caminando, observando pequeños peces saltando más allá de las olas, cuando recibió el mordisco. No vio ningún pez ni ningún otro animal alrededor.

A pesar de que no se ha podido identificar la especie responsable y de la presencia de gran número de peces en la zona, las autoridades lo han calificado como ataque de tiburón.

Se trata del ataque número 11 producido en la zona de Volusia County en lo que va de año, pero ninguno de ellos ha provocado heridas de consideración.


Tiburones y un pez golfar

Son evidentes los paralelismos con el caso ocurrido este verano en la playa de San Juan, Alicante y el “pez golfar” (ver post anterior).

Solo que en esta ocasión no se produjo ningún histerismo por parte ni de población ni de autoridades, ni se trató de ocultar información. Es más, Rob Horester, capitán de la patrulla de playas de Volusia County ha explicado que esta época del año es temporada de “bait fish”, "peces-cebo” tales como salmonetes, sardinas, etc. Y la abundancia y cercanía a la playa de éstos atrae a ejemplares jóvenes de tiburón, que con frecuencia protagonizan este tipo de incidentes, “nip and let go”: muerden o arañan e inmediatamente sueltan y se van.

En la imagen el lugar del incidente y Kyle descendiendo de la ambulancia por sus propios medios.