A partir del pasado 1 de abril, en Nueva Zelanda el tiburón blanco tiene protección total en sus aguas territoriales: un perímetro de 200 millas naúticas.
El ministro de Conservación Chris Carter realizó para la ocasión unas interesantísimas manifestaciones, con gran valor para cambiar la imagen que todavía mucha gente mantiene de estos animales.Dijo que: "Estos majestuosos animales devienen de un modo natural en poblaciones poco numerosas y, sin protección, se podrían encontrar rápidamente al borde de la extinción".
Y el Ministro de Asuntos de Pesca añadió que "nadie quiere ver a esta especie cazada hasta la extinción por causa de una dentadura o trofeo, incluso si se trata de capturas accidentales. En ningún caso se podrá sacar beneficio de capturar un tiburón blanco".
De hecho, las multas económicas son fuertes e incluso se contempla la pena de hasta 6 meses de prisión por incumplir esta ley. Para proteger a la población todavía es legal el uso de redes de protección en algunas playas.
Si ocurriera una captura accidental, en estas redes o por algún pescador, solo se podrá evitar la sanción si se informa y registra la muerte del animal con las autoridades.
La ley tampoco permite poseer o comerciar en territorio neozelandés con partes (dientes, etc.) de este animal. Y los barcos bajo bandera de este país tampoco podrán pescar al tiburón blanco en ninguna parte del mundo.
Un sonoro aplauso para Nueva Zelanda, a ver si aprendemos por aquí, que lo poco que tenemos lo estamos esquilmando. Y es una verguenza, se supone que somos un país del primer mundo.
1 comentario:
Pues sí, un aplauso para las autoridades neozelandesas. Muchos países y muchos de nosotros deberíamos aprender de lo hecho.
Qué manía con ver al tiburón blanco como el depredador de humanos que no es y negarle la protección.
Ole, ole y ole.
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